De regreso a casa, Jun-young contempla un accidente en la carretera. Una de las vÃctimas es su propia hija. A partir de aquÃ, la escena se le repite, como un fatÃdico loop, como un trauma del que no puede escapar. Con la ayuda de un paramédico que ha perdido a su mujer, Jun-young intentará salvar lo inevitable, y salir de esa funesta jornada, que se reitera como una versión perversa del dÃa de la marmota.